Por Agustín Boffi
El domingo 26 de noviembre, se llevó a cabo, en el Museo Nacional de Aeronáutica (MNA), una exhibición a puertas abiertas del Grupo Técnico de Restauraciones Aeronáuticas (GTRA) con el objetivo de acercar al público los proyectos que se encuentran en restauración. aeroespacio estuvo presente y entrevistó a los voluntarios que integran el Grupo Sikorsky.
¿Cuándo comenzaron los trabajos sobre el helicóptero? ¿Cómo se encontraba la aeronave antes?
“El proceso de restauración empezó en 2021. La aeronave estuvo a la intemperie más de cuarenta años en el Aeroparque Jorge Newbery. Durante ese tiempo, se le hicieron esquemas de pintura que no eran los originales hasta que fue trasladada al MNA en el año 2016 y se pudo apreciar el mal estado en el que estaba. Las palas del rotor principal estaban agujereadas al igual que la superestructura. Los instrumentos de su panel principal no existían, algunos estaban dañados y otros habían sido robados. Este helicóptero es un Sikorsky S55/H19A que data de principios del año 50, y el ejemplar que tenemos en el hangar estuvo en servicio durante la guerra de Corea. Es una reliquia histórica y queremos que, para mitad de 2024, la aeronave esté terminada para poder presentarla en el museo”.
¿Cuáles fueron los trabajos que se le realizaron al Sikorsky?
“Se desmontó el motor completamente, que estaba atascado, y se puso en óptimas condiciones. Las carcasas de la parte superior de su estructura están hechas. También el panel de instrumentos está casi acabado, si bien no logramos conseguir los originales, algunos de ellos fueron impresos en 3D. En la actualidad, enciende, y la idea es montarlo en su respectivo lugar y, una vez que el helicóptero esté en muestra estática, colocar una escalera hacia su cabina para que todos logren verlo. Por otro lado, las palas del rotor y la cola se restauraron, porque también estaban en mal estado, tenían rayones y agujeros por todos lados. Se tuvieron que hacer parches para arreglarlos y aún faltan los últimos retoques. Algo para destacar es que están hechas de aluminio, son realmente muy pesadas, es increíble pensar que, con la robustez que tiene este Sikorsky, despegaba y se mantenía en vuelo. También se colocaron parches en gran parte de su estructura principal, tanto en la “panza” como en la “espalda”. El nivel de oxidación que tenía era impresionante, con solo tocarlo se rompía.
Hoy estamos en la última recta del proyecto, pintura final y armado. Lo que vamos hacer es colocarle el esquema que solía tener originalmente. Este Sikorsky tendrá el morro rojo, su cuerpo plateado y los característicos detalles amarillos en su cola. También vamos a incorporar todas las luces de la aeronave, incluidas las de su parte externa. Es evidente que el sistema eléctrico estaba cortado, pero logramos volver a encenderlo. Por otra parte, tuvimos que arreglar y sujetar el tren de aterrizaje para que quede fijo. Parecía un helicóptero “pistero”, que iba al ras del suelo”.
¿Qué es lo que más destacan de esta aeronave?
Es uno de los primeros modelos de helicópteros operativos en el mundo. Si miramos su estructura, el concepto se mantuvo a lo largo de los años. Su diseño es llamativo por la ubicación de su motor, justo en el frente, por lo que el piloto queda “encerrado” entreeste y el rotor principal.
Se cree que ningún tripulante escuchaba con claridad y dudamos de que las comunicaciones internas de la aeronave ayudasen a solucionar este problema. Si llegaba a estallar la transmisión, era una catástrofe para la tripulación.
Si comparamos la ubicación de los pilotos con cualquier otro helicóptero, podemos deducir que no tenían una buena visión, porque el inconveniente de esa época era la motorización. No había motores a turbina fiables para una aeronave de este tipo, por lo que los ingenieros fueron por los motores a explosión. Por otra parte, las palas de los rotores tampoco ayudaban, al ser de aluminio eran muy pesadas y hacían más ruido. Algo que siempre me sorprende es que, para moverlas, se necesitan cuatro personas. En síntesis, es un helicóptero al que le tomas cariño por su historia. Estéticamente, no es lindo, pero eso es lo de menos.
¿Cuáles son los proyectos que están prontos a presentarse?
Tenemos varios. En primer lugar, un motor Merlin que ya está casi listo, solo resta pintar sus caños de escape y, una vez finalizado ese trabajo, se liberará al grupo que trabaja ahí para que se dedique a otro. También tenemos una avioneta Ranquel, una de las primeras de desarrollo nacional, a la que solo falta colocarle sus alas y, por último, el Sikorsky. Ese es el orden de entrega, de no mediar inconvenientes. Queremos liberar espacio en el hangar para poder entrar el Avro Lincoln. Este fue el proyecto inicial del GTRA, pero un trabajo de este tipo no podía ser realizado tan fácilmente, debido a la cantidad de insumos requeridos. Lo bueno es que se han restaurado sus torretas, tanto la frontal como la trasera. El problema de esta aeronave es que tiene trancadas sus ruedas, no pueden moverse. Por eso, fue necesario obtener trenes de camión, algo que en teoría solucionaría el problema. Primero, habrá que hacer una estructura para apoyar sus ruedas, obviamente. Sabemos que el proyecto del Avro puede durar años, es algo que se inicia y no se sabe cuando terminará. El GTRA se fundó hace casi quince años y, hoy en día, los avances más importantes fueron en torno a sus torretas, las cuales se desmontaron. Luego, se pusieron en condiciones sus sistemas eléctricos, que son aquellos que permiten el giro y el accionar de los cañones. Nuestro sueño es lograr un museo que cuente con material interactivo, que no sea solo estático, sería algo muy atractivo para los más jóvenes.
El Grupo Técnico de Restauraciones Aeronáuticas se encuentra abierto a cualquier persona que quiera incorporarse, sin importar su profesión. Lo único que se necesita es la voluntad de trabajar y el deseo de devolverle la vida a las piezas históricas de nuestra nación, abandonadas hace años. Todos los sábados, los hombres y mujeres que forman el GTRA, se reúnen en el hangar 4 para cumplir con ese tan ansiado objetivo: la recuperación y la restauración de nuestra historia.
Fuente: GTRA, MNA y Agustín Boffi
Fotos: Grupo Técnico de Restauraciones Aeronáuticas/Agustín Boffi
¡Qué genial la exhibición del Grupo Técnico de Restauraciones Aeronáuticas! Ver cómo reviven el Sikorsky S55/H19A, con su historia de la guerra de Corea, es puro arte. Detalles desde reconstruir el motor hasta imprimir en 3D los instrumentos. ¡Increíble! La pasión por la autenticidad histórica, devolverle el look original al Sikorsky, y otros proyectos en camino, como el Avro Lincoln, demuestran su dedicación. Y que cualquiera pueda unirse al GTRA, sin importar la profesión, es lo más inclusivo. Este grupo no solo restaura aviones, ¡sino que también revive la historia! ✈️