GE Aeroespace, proveedor de motores a reacción, componentes y sistemas para aviones comerciales y militares, se unió a la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) en el desarrollo del esquema de pintura para el avión eléctrico híbrido que volará como parte del proyecto de demostración de vuelo del tren motriz electrificado (Electrified Powertrain Flight Demonstration, EPFD) de la NASA.
Bajo el proyecto EPFD, GE Aerospace desarrolló un tren motriz eléctrico híbrido de clase megavatio que será sometido a pruebas tanto en tierra como en vuelo a mediados de esta década. Para apoyar estos ensayos, Boeing y su subsidiaria Aurora Flight Sciences se asociaron con GE utilizando un avión Saab 340B modificado y propulsado por los motores CT7.
En declaraciones a los medios, el gerente general de tecnología avanzada de GE Arjan Hegeman anunció: “GE Aerospace prevé un futuro de vuelo más eléctrico. Nuestras colaboraciones de investigación con la NASA continúan avanzando en sistemas de propulsión de última generación con un objetivo importante: impulsar los esfuerzos de la industria para mejorar la eficiencia y reducir las emisiones en comparación con los motores de los aviones de hoy en día”.
En la última década, la compañía de motores para la aviación alcanzó varios hitos técnicos en el desarrollo del sistema a propulsión eléctrica híbrida. En 2022, completó la primera prueba mundial de un sistema de propulsión eléctrica híbrida de clase MW y multikilovoltios (kV) en condiciones de altitud de hasta 45.000 pies que simulan un vuelo comercial de un solo pasillo. El ensayo se llevó a cabo en el banco de pruebas de aviones eléctricos de la NASA. Previo a esto, en el 2016, GE comenzó a madurar el sistema de propulsión eléctrica híbrida a través de una serie de pasos cada vez más complejos.
Para satisfacer la creciente demanda de pruebas de componentes de motores para la aviación eléctrico híbrida de los próximos años, GE Aerospace anunció en mayo de 2023 un proyecto de inversión hasta 20 millones de dólares para agregar una nueva célula de prueba y equipo en el Centro de Sistemas Integrados de Energía Eléctrica (EPISCenter) en Dayton, Ohio.
Las tecnologías de propulsión eléctrica híbrida pueden ayudar a mejorar el rendimiento del motor, reduciendo el consumo de combustible y las emisiones.
A fines del mes de julio del corriente, en el espectáculo aéreo de Oshkosh en Wisconsin, Estados Unidos, GE Aerospace debutó con su nuevo diseño de librea para el banco de pruebas de aeronaves en el proyecto EPFD, un esfuerzo histórico para ayudar a demostrar la viabilidad del vuelo eléctrico híbrido para la aviación comercial.
Asimismo, para los vuelos de prueba eléctricos híbridos, GE Aerospace se asoció con Boeing y su subsidiaria Aurora Flight Sciences utilizando un avión Saab 340B modificado impulsado por los motores CT7 de GE.
A pesar de las apariencias, el banco de pruebas eléctrico híbrido no será un avión normal. La aeronave ilustrada en la foto de entrada será modificada con la ayuda de Aurora Flight Sciences para luego incorporarle el sistema eléctrico híbrido en paralelo con las turbinas de gas CT7 tradicionales y probar un motor eléctrico de conversión, gestión de energía y otras tecnologías.
Fuente y foto: GE Aeroespace, Press.