El proyecto QUBIC cuenta con un telescopio de alta tecnología único en el mundo, instalado y montado en San Antonio de los Cobres, Salta. CONICET, Ministerio de Ciencia y Tecnología MINCYT, Comisión Nacional de Energía Atómica CNEA y el gobierno provincial lideran a nivel local este proyecto de colaboración del que participaron más de 130 especialistas de Argentina y distintos países. En la ceremonia de inauguración estuvieron presentes las autoridades de las instituciones y organismos involucrados y científicos nacionales e internacionales.
A 5 000 metros de altura sobre el nivel del mar, en la localidad de Alto Chorrillos, en plena Puna salteña, se encuentra el QUBIC, un instrumento de precisión para medir señales del cosmos que buscan aportar conocimiento sobre el origen del universo y los instantes inmediatamente posteriores. La iniciativa es llevada adelante por una colaboración internacional que involucra universidades, organismos científicos y centros de investigación de Argentina, Francia, Italia, Reino Unido y Estados Unidos.
La presidenta del CONICET, Ana Franchi, remarcó la importancia del trabajo en conjunto entre distintas instituciones para llegar a concretar el proyecto: “Es un esfuerzo de varios países que se hace en Argentina, gracias a la calidad de los recursos humanos que tenemos en nuestro país. Y agregó: “Es un orgullo inmenso como país poder contar con esta tecnología. Como investigadora y hoy presidenta del CONICET también es un orgullo nos hayamos podido juntar y colaborar los trabajadores de todas estas instituciones de ciencia y tecnología para llegar a esto”.
Por su parte, el ministro de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus, agradeció a los países que participan y especialmente “a nuestros amigos de Italia y Francia que lo llevaron adelante y creyeron en nosotros”, y continuó: “Los proyectos científicos exigen miradas a mediano y largo plazo. Hay que apostar a la ciencia y la tecnología para mejorar las condiciones de vida de la humanidad”.
QUBIC (Q-U Bolometric Interferometer for Cosmology) está operando actualmente pero, para llegar a poner en función todo lo necesario en cuanto a equipamientos, caminos, conexiones y comunicaciones fue imprescindible contar con un lugar físico en la localidad, donde también se encuentra el radiotelescopio argentino-brasileño LLAMA (Large Latin American Millimiter Array). De esta manera, el Noroeste argentino se transformará en un centro de atracción científica a nivel nacional y regional.
Como explicó la astrónoma Beatriz García, investigadora del Consejo y representante del Proyecto QUBIC en Argentina, “el telescopio es un instrumento con un diseño novedoso, destinado a sondear lo que se denomina la física del universo primordial, es decir, lo que ocurrió en unas pocas fracciones de segundo después del Big Bang. En ese momento sucedió lo que se denomina inflación, que los científicos suponen que dejó sus huellas en una radiación conocida como “de fondo cósmico en microondas”.
En este marco, Alberto Etchegoyen, investigador del CONICET y uno de los voceros del proyecto aseguró: “Si encontramos esos atisbos en la radiación del cosmos, se podrá comprobar la creación del universo con el Big Bang. Los resultados altamente optimistas podrían darse en un estimado de tres años, depende de qué tan buena sea la naturaleza y el universo cuando nos dispongamos a trabajar”, anticipó.
A su turno Adriana Serquis, presidenta de la CNEA, detalló: “El Qubic tiene unos sensores especiales que se desarrollan con micro y nanotecnología, que vienen de Italia, pero ahora con un acuerdo con Alemania se están haciendo estos sensores en el CACde este instituto que es CNEA-CONICET, por eso esa sinergia entre instituciones de ciencia y tecnología que permiten ir desarrollando el conocimiento en otras áreas”.
El ministro de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de Salta, Matías Cánepa, expresó la importancia que tiene esta inauguración para Salta y la calificó como “un paso fundamental para avanzar en el polo astronómico en la Puna salteña, que tiene un impacto nacional e internacional. El escuchar hablar a diferentes personas en distintas lenguas demuestra que es un proyecto de gran impacto en el ambiente científico, en la divulgación de la ciencia y hasta en el turismo científico, es de gran importancia para la región”, concluyó.
La construcción de la infraestructura que alberga el telescopio, con la instalación de generadores y tanque de combustible y el diseño y construcción del sistema eléctrico, debieron ser complementadas con otras como la construcción de caminos de acceso y la instalación del albergue, además de llevar energía y comunicaciones al sitio. El instrumento ya está operativo y en condiciones de comenzar a adquirir datos para calibración.
Fuente y fotos: CONICET