Por Miguel Alejandro Sánchez Peña

El jueves 27 de octubre aeroespacio participó de esta jornada, que abordó la temática de la cronobiología en la base Belgrano II y el manejo del sueño aplicado a la fatiga en las tropas especiales. Las conferencias tuvieron lugar en la Universidad de la Defensa Nacional (UNDEF).

En su ponencia sobre la cronobiología al servicio de la defensa, el biólogo y divulgador científico Diego Golombek, de UNQuilmes-UdeSA, hizo alusión al ritmo circadiano y su influencia en nuestra vida diaria.

Es un reloj interno que controla los ritmos cíclicos de sueño y vigilia, está ligado al día y la noche y con las variables ambientales y a su vez se correlaciona con un mayor o menor rendimiento en el trabajo.

Según explicó Golombek, se realizó un estudio en las dotaciones antárticas de la base Belgrano II en relación a los efectos de la desincronización entre el día y la noche en esa región, la cual se puede volver crónica por las características del clima, que tiene períodos de muchos meses de luz y otros de oscuridad.

También mencionó los cronotipos, búhos o vespertinos y alondras o diurnos y los rendimientos diarios de cada uno; el sueño y su relación con el dormir (cuanto y como), lo que a su vez influye en un mejor o peor rendimiento, cansancio, somnolencia, estado de ánimo, capacidad de memoria y aprendizaje, enfermedades como diabetes y, obesidad y también sobre el sistema inmune y la propensión a accidentes.

A su turno, la Dra. Camila Tortello, psicóloga de UCA/CONICET, expuso sobre la adaptación psicológica a latitudes extremas, en la que dio cuenta de un estudio en la base Belgrano II con las dotaciones acerca de la adaptación al aislamiento y al fenómeno que los especialistas llaman “fotoperiodo extremo” (cuatro meses de oscuridad y cuatro meses de luz), un factor que suele influir en las variables psicológicas.

Los trastornos afectivos estacionales que aparecen por falta de luz solar, como el síndrome de invernada (noche polar) pueden alterar los estados de ánimo y traer como consecuencia depresión, hostilidad e influir en la performance cognitiva.

Se tomaron las variables de afrontamiento (lidiar con el estrés) y variables sociales y ocupacionales (clima grupal, apoyo social) ya que, en la medida que avanza el período de permanencia, puede aparecer deterioro psicológico.

Víctor Demaría Pesce, de la Agencia Espacial Europea (ESA), se refirió a la colaboración entre la ESA y las bases argentinas en la Antártida, especialmente la Base Belgrano II, que se concreto hace cuatro años con una carta de intención y posteriormente un acuerdo con cancillería y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE). El propósito de esta cooperación es realizar experiencias científicas y médicas en la Antártida para futuras misiones a la Luna y Marte.

Por su parte, Daniel Vigo (UCA – CONICET), habló sobre cronobiología durante el aislamiento antártico; los dos relojes, el interno y el reloj del tiempo e hizo una analogía entre la Antártida, el Laboratorio de Agencia Espacial Alemana (DLR), MARS 500 (una misión simulada a Marte impulsada por el Instituto de Problemas Médicos y Biológicos de la Academia de Ciencias de Rusia, cuyo objetivo es estudiar las dificultades a las que deberá enfrentarse una tripulación en una misión al planeta rojo) y la Estación Espacial Internacional (ISS), para investigar los efectos físicos y psicológicos ante el aislamiento y la falta de luz en un viaje al espacio.

La Dra. Malena Mul Fedele (UCA CONICET) tocó el tema de la fatiga, a la que definió como una falta de energía y motivación y que suele estar acompañada por somnolencia y apatía. El rendimiento mental y físico se encuentra reducido y sus causas son alta carga laboral, falta de sueño o vigilia prolongada y alteración de los ritmos circadianos, producto de jornadas no convencionales por horarios de trabajo rotativos, nocturnos y guardias medicas.

Como ejemplo de la modelización bio-matemática que realizó, descubrió que la fatiga tiene consecuencias individuales, organizacionales y sociales, entre las que mencionó la baja en la atención, desmotivación, depresión o cambios en el humor (individuales) y baja productividad, clima laboral insatisfactorio (organizacionales).

El principal objetivo es representar la realidad a través de algoritmos y así poder predecir o conocer los niveles de fatiga (sueño/vigilia) y poder evitar o disminuir sus consecuencias.

Con la determinación del riesgo de fatiga se pueden diseñar turnos más adecuados y seguros para el personal y en especial en tareas de riesgo.

A continuación, el Ten. Primero Facundo Etchehun, de la Escuela Militar de Montaña Bariloche de Río Negro, presentó un curso que consta de un entrenamiento en la montaña durante los periodos estival e invernal, que incluye una formación en técnicas didácticas de enseñanza y un curso de esquí. El objetivo es la gestión del sueño en tropas de operaciones especiales.

Con esta investigación se apunta a armar un modelo de degradación del sueño y aplicarlo al curso de cazadores de montaña, el cual conlleva un importante esfuerzo. Se tendrán en cuenta factores como exigencia y trato del instructor, agentes ambientales, alimentación y sueño.

Al finalizar la jornada, Agustín Folgueira, médico del Ejército Argentino, abordó el manejo del sueño en las Fuerzas Armadas. Entre las actividades militares, el combate representa el mayor esfuerzo psicofísico y estrés (guardia nocturnas, mayor cantidad de horas de vigilia, sueño no reparador) que pueden incidir en el rendimiento y en los errores que se pueden cometer.

La importancia de los temas expuestos es su aplicación tanto en el ámbito militar como civil. Las experiencias en la Antártida y el aislamiento pueden extrapolarse a escenarios de futuros viajes espaciales.

‌