El fabricante de aviones estadounidense Sikorsky, de Lockheed Martin, junto al Ejército de Estados Unidos, proyecta un diseño de modernización para el versátil helicóptero UH-60M Black Hawk, piedra angular de la aviación militar estadounidense. Esta actualización busca optimizar las operaciones globales para las próximas décadas. La aeronave cumple funciones en 34 fuerzas armadas de todo el mundo y es concebido como un helicóptero utilitario resistente y fiable.
El Black Hawk, gracias a su gran versatilidad y capacidad de llevar a cabo procedimientos críticos de forma rápida y rentable, es utilizado en operaciones militares tales como evacuaciones médicas, ayuda humanitaria, transporte de alimentos y bebidas, entre otras. Actualmente, el Ejercito de los Estados Unidos posee activas más de 2100 unidades.
Dentro de las modificaciones diseñadas para UH-60M, Sikorsky incorporará un motor de turbina mejorado (ITE) para optimizar la planificación de las misiones de asalto aéreo para que el avión pueda volar más lejos, llevar mayor carga útil en un solo tanque de gas y maximizar la economía de combustible. El fabricante está aprovechando al máximo los datos y los conocimientos de la integración del ITE con su prototipo de avión de reconocimiento de ataque futuro (FARA), lo que ayudará a acelerar y simplificar la integración con el Black Hawk. Con el ITE programado para múltiples plataformas de aviación, el Ejército obtiene la oportunidad de volar con un avión de campo, obteniendo información y reduciendo el riesgo para programas como Future Vertical Lift.
El Ejército norteamericano planea tener drones de efectos lanzados (LE) ligeros y de bajo costo que vuelen en enjambres y alimenten inteligencia en las fuerzas conjuntas. Estos drones son altamente capaces, pero tienen un alcance limitado, y necesitan un helicóptero desplegado hacia adelante para lanzarlos y controlarlos. El Black Hawk podría, con algunas actualizaciones directas, lanzar y controlar drones LE, ofreciendo más opciones y flexibilidad para el reconocimiento. Eso complementaría las capacidades de LE existentes en los helicópteros Apache.
La tecnología avanza de manera rápida, y el Ejército necesita formas asequibles de mantener los aviones al día con las últimas innovaciones. Es por eso que la estrategia del Enfoque Modular de Sistemas Abiertos (MOSA) es de gran importancia. MOSA crea una red troncal digital estandarizada para la electrónica como sensores, radios y aviónica, actualizables fácilmente con el tiempo.
El fabricante ha desarrollado una versión inicial de un kit de columna vertebral digital para el UH-60M, que ofrecería muchos de los beneficios de MOSA sin tener la necesidad de remodelar la arquitectura del helicóptero. Las innovaciones digitales también abren la puerta a un mantenimiento más inteligente y económico.
Se estima que la inversión será duradera y que el Ejercito dispondrá de los helicópteros Black Hawk hasta la década de 2070. De esta manera, aprovechan las inversiones anteriores del Ejército en FARA para acelerar las nuevas capacidades, al tiempo que reducen el riesgo para los futuros programas de elevación vertical mediante el despliegue de capacidades de próxima generación en una plataforma de campo.
Fuente y foto: Lockheed Martin