Un gran salto para la humanidad
Por Alfredo Martínez
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Eran las 2:56 UTC (hora internacional) de aquel lunes 21 de julio, de hace 54 años, cuando el comandante de la misión Apolo 11, Neil Armstrong, pisó por primera vez nuestro único satélite natural y pronunció la frase que iba a quedar marcada, por siempre, sobre este acontecimiento histórico: “Un pequeño paso para el hombre, un gran salto para la humanidad”.
Imagen de la huella de la bota de Buzz Aldrin sobre suelo lunar. Foto: NASA
La misión, que había aterrizado el domingo 20 a las 22:56, hora de EE. UU., había sido lanzada 4 días antes desde el Complejo de lanzamiento 39 del Centro espacial John F. Kennedy en Florida, Estados Unidos. Llevaba a bordo a tres experimentados astronautas: el comandante Armstrong; el piloto del módulo lunar “Eagle”, Edwin E. “Buzz” Aldrin Jr., segundo hombre en pisar el suelo selenita; y el piloto del módulo de mando “Columbia”, Michael Collins.
Aldrin fotografiado por Neil Armstrong durante la actividad extravehicular. En primer plano, el Paquete de Experimentos Sísmicos Pasivos; más allá, el retroreflector de alcance láser (LR-3); en el fondo, en el extremo derecho, el módulo lunar “Eagle”. Foto: NASA
El regreso de la nave se produjo el 24 de julio, ocho días, tres horas, 18 minutos y 35 segundos después de que el Saturno V abandonara la rampa de Cabo Cañaveral. El amerizaje, sobre el Océano Pacífico, al sudeste de las islas Hawái, fue extremadamente preciso, arribando solo a 2 mn del punto previsto al inicio.
Amerizaje en el Océano Pacífico, a 13 millas del buque de recuperación USS Hornet. Foto: NASA
Esta misión fue un rotundo éxito para el gobierno estadounidense comandado por el presidente Richard Nixon y un homenaje a su mentor, el presidente John F. Kennedy, quien no pudo disfrutar del acontecimiento tras haber sido asesinado en 1963.
En nuestro país, Brasil y Uruguay, el 20 de julio, alusivo al día que la nave alunizó en el Mar de la Tranquilidad, es la fecha propuesta para celebrar el Día del Amigo, como un recuerdo a favor de dar valor y realce a la amistad, fomentando de esta manera la cultura de la paz entre los seres humanos.