Natilus, una empresa estadounidense fundada en 2016 por Aleksey Matyushev y Anatoly Star, se propuso transformar el transporte aéreo de mercancías en una solución accesible, sostenible y eficiente. Con una visión centrada en la innovación tecnológica y la sostenibilidad, esta empresa busca reducir los costos asociados al transporte aéreo para lograr un impacto significativo en los precios de los alimentos, eliminar barreras en el comercio transfronterizo y conectar regiones con infraestructuras limitadas con el resto del mundo.
Esta empresa se posiciona como un actor clave en el desarrollo de aeronaves de alta eficiencia, concebidas para modernizar la economía de la aviación comercial y, al mismo tiempo, responder a las preocupaciones ambientales globales. Su propuesta tecnológica se basa en el diseño de fuselajes de ala combinada, también conocidos como blended wing body (BWB), una estructura que elimina la tradicional separación entre fuselaje y alas para integrarlos en una pieza única y aerodinámica.
Esta innovación ofrece múltiples beneficios, desde una mayor eficiencia de combustible hasta la ampliación del espacio interno, lo que permite transportar mayores cargas útiles y operar con la infraestructura aeroportuaria actual. Las aeronaves destacan por reducir el consumo de combustible hasta en un 30 %, disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 50 % y ser un 25 % más ligeras gracias al uso de compuestos de fibra de carbono.
Uno de los proyectos más ambiciosos de Natilus es Horizon, una aeronave diseñada para revolucionar el transporte aéreo comercial tanto en términos de sostenibilidad como de experiencia del usuario. Horizon, que se espera que entre en servicio en 2030, es el reflejo del compromiso de la empresa con la innovación y la responsabilidad ambiental. Con capacidad para transportar hasta 200 pasajeros, este modelo está diseñado para cubrir rutas de largo alcance como Los Ángeles-Boston o Nueva York-Londres.
El diseño de la fusión de Horizon no solo optimiza el consumo de combustible, sino que amplía las posibilidades de configuración interna, proporcionando mayor comodidad y flexibilidad a los pasajeros. La disposición de los motores en la parte trasera, sobre el fuselaje, reduce significativamente el ruido en la cabina, lo que crea un ambiente más tranquilo y agradable. Además, la amplitud del espacio interno y las ventanas panorámicas integradas ofrecen una experiencia de vuelo más relajado.
Desde el punto de vista ambiental, Horizon se presenta como una solución avanzada para afrontar el reto de la neutralidad de carbono en la aviación, una meta fijada por numerosas aerolíneas y organizaciones internacionales para 2050. La eficiencia del diseño BWB, combinada con la posibilidad de incorporar tecnologías de propulsión futura, como el hidrógeno o fuentes de energía renovables, subraya la adaptabilidad del modelo a los estándares ambientales más exigentes.
Con proyectos como Horizon, la compañía no solo redefine los estándares de eficiencia y confort en la aviación comercial, sino que también promueve un modelo de negocio alineado con las demandas de un mundo cada vez más consciente de su impacto ambiental.
Fuente y fotos: Natilus